sábado, 2 de julio de 2011

"Tiempo" (Premiado por el concurso nacional "Los 100 mejores" en 9no lugar)


Mi vida nunca fue del todo normal, nunca tuve la posibilidad de adaptarme, de socializar o de hacer amigos, ya que con mi padre, después de la muerte de mi madre, estuvimos constantemente viajando y ocultándonos, corriendo de algo desconocido y misterioso, al menos para mi, no nos quedábamos mas de dos días en algún lugar, siempre huíamos, hoy tal vez nos quedemos más tiempo en este hermoso lugar, Las Lajas un pueblito no del todo agrario pero, tampoco muy desarrollado. Mi padre entró a toda prisa a la habitación. — Rápido, vístete —grito nervioso mientras sobre mi cama me ayudaba a ponerme una remera. — ¿Qué pasa esta vez? —pregunte asustado. — Debemos marcharnos, antes de que él nos alcance —me dijo sacándome de la cama y ayudándome a ponerme los zapatos. —Creí que esta vez podríamos quedarnos más en este lugar—dije. —Ya no podemos, hijo, ya se que tu quieres hacer nuevos amigos pero en este momento no podemos quedarnos en ningún sitio tranquilo —decía mientras salíamos de la casita que habíamos alquilado y nos dirigíamos hacia el auto. Subimos a toda prisa y salimos de ese pueblo, — comenzamos de nuevo —pensé, como siempre viajando, pero nunca nos quedábamos lo suficiente para conocer gente, siempre salíamos corriendo, por mi parte ya estaba cansado muy cansado de seguir huyendo. Mas tarde, nos detuvimos en una estación de servicio para cargar combustible y fuimos al baño, mi padre se lanzo sobre el espejo y se quedo contemplando su rostro, por un largo rato, hasta que sobre su pelo encontró un pálido y blanco cabello. —Maldición —vocifero— nos esta alcanzando. — ¿Quién? —pregunte confundido. —Él, nuestro perseguidor, nos esta alcanzando. —Pero ¿Quien es exactamente? nunca me dijiste de quien estamos escapando —dije ya enojado. —Hijo —dijo con tono melancólico— estamos huyendo del asesino de tu madre… — ¿De que estas hablando? mamá tenia cáncer, ella murió por causa de su enfermedad. —Exactamente, por eso huimos, para que él no nos alcance. — Pero ¿Quién es “él”? de que huimos, por amor de dios —grite ya rojo de ira. —No permitiré que él nos alcance —dijo pasando por alto mi pregunta. — ¿Quién diablos es “él”? —volví a preguntar cada vez mas lleno de ira. —Huimos del aterrador y atroz paso del tiempo.

No hay comentarios: